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CAPÍTULO XIII RESTOS DE UN BUQUE ESPAÑOL
Ahora estaba en el año vigésimo tercero de mi residencia en esta isla, y era tan
naturalizado en el lugar y la forma de vida, que podría, pero han disfrutado de la
certeza de que no salvajes venían a la
lugar de molestarme, yo podría haber estado contento de haber capitulado el gasto
el resto de mi tiempo allí, hasta el último momento, hasta que yo me había establecido y muerto,
como la cabra de edad en la cueva.
Yo también había llegado a algunas diversiones y entretenimientos poco, lo que hizo la
pasar el tiempo mucho más agradable conmigo que antes-en primer lugar, me había enseñado
mi encuesta, como he señalado antes, de hablar, y
lo hizo con tanta familiaridad, y hablaba tan articuladamente y llano, que era muy
agradable para mí, y él vivió conmigo no menos de seis y veinte años.
¿Cuánto tiempo podría haber vivido más tarde no lo sé, aunque sé que tienen una idea
en el Brasil en que viven cientos de años.
Mi perro era un compañero agradable y amoroso conmigo por no menos de dieciséis años de mi
tiempo, y luego murió de viejo mero.
En cuanto a mis gatos, se multiplicaron, como he observado, a tal grado que me vi obligado
para disparar a varios de ellos en un primer momento, para evitar que me devora, y todo lo que tenía, pero
al final, cuando los dos viejos me trajeron
conmigo se habían ido, y después de algún tiempo les siguen la conducción de mí, y
dejar que ellos no tienen provisión de mí, todos se volvieron salvajes en el bosque, con la excepción
dos o tres favoritos, que yo domesticados,
y que los jóvenes, cuando los había, siempre me ahogué, y estos eran parte de mi
de la familia.
Además de estos que siempre se mantiene dos o tres niños del hogar de mí, quien me enseñó a
feed de mi mano, y yo tenía dos loros más que hablaban bastante bien, y
todos los que llaman "Robin Crusoe", pero ninguno
como mi primera, ni, de hecho, tomé los dolores con cualquiera de ellos que yo había hecho con
él.
También había varios mansos mar aves, cuyo nombre no sabía, que me llamó a la
la costa, y cortar sus alas, y que está en juego algo que yo había plantado delante de mi
castillo muro que está ahora crecido a un buen
arboleda espesa, estas aves todos los vivió entre los árboles bajos, y se crió allí, que fue
muy agradable para mí, de modo que, como dije antes, comencé a estar muy bien contenta
con la vida que llevé, si yo podría haber sido proporcionadas por el temor de los salvajes.
Sin embargo, se le indique lo contrario, y no estará de más para todas las personas que se reunirán
con mi historia para hacer esta observación simplemente de ella: ¿Con qué frecuencia, en el curso de
nuestras vidas, el mal que en sí mismo se busca
más a huir, y que, cuando se nos caído, es la más terrible para nosotros, es
muchas veces los propios medios o en la puerta de nuestra liberación, por lo que sólo podemos ser
resucitado de la tribulación que nos han caído en.
Podría dar muchos ejemplos de esto en el curso de mi vida que no rinden, pero en
no había nada más particularmente notable que en las circunstancias de mis últimos años
de residencia solitaria en la isla.
Ahora era el mes de diciembre, como he dicho antes, en mis veinte y tres años, y esto,
siendo el solsticio del sur (para el invierno no se puede llamar), era el momento particular de la
mi cosecha, y me obligó a ser muy
tanto en el extranjero en los campos, cuando, saliendo temprano en la mañana, incluso antes de que se
día completo, me sorprendió de ver una luz de algún fuego en la orilla,
a una distancia de mí, de unos tres kilómetros,
hacia la parte de la isla en la que yo había observado algunos salvajes habían sido, como antes,
y no en el otro lado, pero, a mi gran mal, que estaba de mi lado de la
isla.
Yo estaba en realidad terriblemente sorprendido por la vista, y se detuvo en mi bosque,
sin atreverse a salir, para que no se sorprendería, y sin embargo tuve la paz no es más
dentro, de los temores que tenía que
si estos salvajes, en senderismo de la isla, en caso de encontrar mi pie de maíz o
corte, o cualquiera de mis obras o mejoras, inmediatamente a la conclusión de que hay
Había gente en el lugar, y nunca descansar hasta entonces me habían descubierto.
En este extremo volví directamente a mi castillo, tiró por la escalera después de mí,
e hizo todas las cosas sin mirar tan salvaje y natural como pude.
Entonces me preparé en el interior, ponerme en una postura de defensa.
Cargué toda mi artillería, como lo llaman ellos-es decir, mis escopetas, que fueron
montado en mi fortificación y todas las nuevas pistolas, y se resolvieron a defenderme
hasta el último suspiro sin olvidar en serio
elogiar a mí mismo a la protección divina, y de todo corazón a orar a Dios que me librara
fuera de las manos de los bárbaros.
Continué en esta posición alrededor de dos horas, y comenzó a ser impacientes para
inteligencia en el extranjero, porque yo no tenía espías a enviar.
Después de estar sentado un rato más, y meditando lo que debo hacer en este caso, no se
capaz de soportar estar en la ignorancia más, de modo que la creación de mi escalera al lado de la
colina, donde había un lugar plano, como
observado antes, y luego tirar la escalera después de mí, lo configuro una y otra
subió a la cima de la colina, y tirando de mi vaso punto de vista, que yo había tomado
a propósito, me puse en forma plana sobre la barriga
en el suelo, y comenzó a buscar el lugar.
Yo en la actualidad encontramos que había no menos de nueve salvajes desnudos sentados alrededor de una pequeña
el fuego que habían hecho, no para entrar en calor, ya que no tenía necesidad de eso, el tiempo era
muy caliente, pero, como yo suponía, para vestir
parte de su dieta de carne humana bárbara que habían traído con ellos, ya sea
vivo o muerto, no podía decir.
Tenían dos canoas con ellos, que habían izado a la orilla, y como era
entonces reflujo de la marea, que me parecía que esperar por el regreso de la inundación que se vaya
otra vez.
No es fácil imaginar lo que esta confusión me meta en la vista, sobre todo viendo
ellos vienen a mi lado de la isla, y tan cerca de mí, pero cuando me considera su
viene tiene que estar siempre con la corriente de
el flujo, que comenzó después de estar más tranquilo en mi mente, convencida de que me
podría ir al extranjero con seguridad todo el tiempo de la inundación de la marea, si no estuvieran en
tierra antes, y de haber hecho este
observación, me fui en el extranjero acerca de mi trabajo de la cosecha con la compostura más.
Como lo esperaba, así fue, pues tan pronto como la marea hizo hacia el oeste, los vi
todas, coger el barco y la fila (o una paleta, como lo llamamos) de distancia.
Yo he observado, que durante una hora o más antes de irse se fueron
bailar, y yo podría discernir sus posturas y los gestos de mi vaso.
Yo no podía percibir, por mi observación más bonitas, pero que estaban fuertemente
desnudo, y no había por lo menos la cobertura sobre ellos, pero si eran hombres o mujeres que
no podía distinguir.
Tan pronto como vi enviado y se han ido, me llevó dos armas de fuego sobre mis hombros, y dos
pistolas en mi cintura y mi gran espada a mi lado, sin una vaina, y con todos
la velocidad que fue capaz de hacer fue a
la colina donde se había descubierto la primera aparición de todos, y tan pronto como llegue
allá, que no estaba en menos de dos horas (para que no podía ir rápido, ser tan
cargado de armas como yo), me di cuenta de
ha habido tres canoas de los salvajes más en ese lugar, y mirando hacia fuera
más lejos, vi que eran todos juntos en el mar, haciendo más para el principal.
Este era un espectáculo terrible para mí, sobre todo porque, de bajar a la orilla, pude ver
las marcas del horror que la obra triste que había estado a punto había dejado detrás de él-a saber.
la sangre, los huesos, y parte de la carne
de los cuerpos humanos comido y devorado por los miserables con la alegría y el deporte.
Yo estaba tan llena de indignación a la vista, que ahora comenzó a premeditar la
destrucción de la siguiente que vi allí, que sean cuales o cuantos soever.
Parecía evidente para mí que las visitas que hicieron tanto para esta isla se
no es muy frecuente, ya que era más de quince meses antes de que más de ellos llegó a
shore allí de nuevo-es decir, yo no
los vi ni huellas o señales de ellos en todo ese tiempo, porque en cuanto a la lluvia
temporadas, a continuación, que están seguros de que no vengan en el extranjero, por lo menos no hasta ahora.
Sin embargo, todo esto mientras yo vivía incómodamente, por razón de los temores constantes de
su venida a mí por sorpresa: ¿de dónde he observado, que la expectativa de
el mal es más amargo que el sufrimiento,
sobre todo si no hay lugar para quitarse de encima esa expectativa o aprehensiones ellos.
Durante todo este tiempo yo estaba en un humor asesinato, y pasó la mayor parte de mis horas, lo que
debería haber sido mejor empleado en idear la manera de eludir y caer sobre
que la próxima vez que se ven a sí
especialmente si se debe dividir, como lo fueron la última vez, en dos partes;
ni considero en absoluto que si maté a una de las partes-supongo diez o doce, que se
Todavía al día siguiente, o una semana o un mes, a
matar a otro, y por lo otro, incluso hasta el infinito, hasta que debe ser, al fin, no
menos un asesino que se encontraban en el ser del hombre-comedores, y tal vez mucho más.
Me pasaba los días ahora en gran perplejidad y angustia de la mente, esperando que yo
un día u otro caen, en manos de estas criaturas sin piedad, y si lo hiciera en
cualquier empresa en el extranjero, no sin
mirar a mi alrededor con el mayor cuidado y precaución imaginable.
Y ahora me encontré, para mi gran consuelo, qué feliz era lo que me había proporcionado un manso
rebaño o manada de cabras, pues no me atrevía a cualquier cuenta de mi arma de fuego, especialmente
cerca de ese lado de la isla donde se
por lo general vino, para que no me alarma a los salvajes, y si había huido de mí ahora,
Yo estaba seguro de que vengan de nuevo con unos dos o trescientos canoas con
en unos pocos días, y entonces yo sabía qué esperar.
Sin embargo, yo llevaba un año y tres meses más antes de que yo haya visto más de la
salvajes, y luego he encontrado otra vez, como pronto se observe.
Es cierto que podrían haber estado allí una o dos veces, pero o bien no hizo ninguna estancia, o
al menos yo no los vi, pero en el mes de mayo, lo más cerca que podía calcular,
y en mis cuatro años y vigésimo año, tenía una
encuentro muy extraño con ellos, de los cuales en su lugar.
La perturbación de mi mente durante este intervalo de quince o dieciséis meses fue
muy grande, me dormí unquietly, siempre soñó con sueños horribles, y empecé a menudo
de mi sueño en la noche.
En los días grandes problemas abrumado mi mente, y en la noche soñé con frecuencia de
matar a los salvajes y de las razones por las que podrían justificar hacerlo.
Pero renunciar a todo esto por un tiempo.
Fue a mediados de mayo, el día dieciséis, creo que, al igual que mi pobre
calendario de madera se calculan, por que he marcado en todos los mensaje aún, digo yo, que estaba en
el dieciséis de mayo de que desperdiciaron una muy
gran tempestad de viento durante todo el día, con una gran cantidad de relámpagos y truenos, y, muy
noche mal fue después de él.
Yo no sabía lo que era la ocasión en particular de la misma, pero como yo estaba leyendo en la Biblia,
y ocupado con pensamientos muy serios acerca de mi estado actual, me sorprendió
con el ruido de un arma de fuego, como yo pensaba, disparó en el mar.
Este fue, sin duda, una sorpresa bastante de una naturaleza diferente de cualquier otra que se había reunido con
antes, por las nociones este puesto en mis pensamientos estaban muy de otro tipo.
Empecé en la mayor premura imaginable, y, en un instante, dio una palmada a mi
escalera en el lugar medio de la roca, y lo logró después de mí, y que el montaje
segunda vez, llegó a la cima de la colina de la
mismo momento en que una llamarada de fuego manda que yo escuche de una segunda arma, la cual,
en consecuencia, en casi la mitad de un minuto oí, y por el sonido, sabía que era
de esa parte del mar en el que fue impulsado por la corriente en mi barco.
De inmediato consideró que este debe ser un buque en peligro, y que habían
algún compañero, o algún otro barco de la compañía, y disparó estos para las señales de
angustia, y para obtener ayuda.
Tuve la suficiente presencia de ánimo en ese minuto para pensar, que aunque no podía evitar
ellos, podría ser que puedan ayudarme, así que reunió a toda la madera seca que
se puede tener en la mano, y hacer una buena
pila de guapo, lo prendió fuego en la colina.
La madera se seca, y ardió libremente, y aunque el viento soplaba muy fuerte, sin embargo,
quemado bastante fuera, de modo que estaba seguro de si había tal cosa como un barco,
que necesita verlo.
Y sin duda lo hicieron, pues tan pronto como siempre mi fuego ardió, oí otra arma de fuego, y
después de que varios otros, todos en el mismo periodo.
Yo IMPLÍCITAS mi fuego toda la noche, hasta el amanecer, y cuando era pleno día, y
el aire se aclaró, vi algo a una gran distancia en el mar, este total de la
isla, ya sea una vela o un casco que podría
no distingue, no, no con mi vaso: la distancia era tan grande, y el clima
sigue siendo algo confusa también, al menos, era tan en el mar.
Miré con frecuencia en todo el día, y pronto se dio cuenta de que no se movió, así que
actualmente la conclusión de que se trataba de un barco anclado, y desear, usted puede estar seguro,
estar satisfecho, me tomé mi arma en mi mano,
y corrió hacia el lado sur de la isla a las rocas donde había anteriormente
dejado llevar por la corriente, y hacer allí, el clima en este momento
ser perfectamente claro, yo podía ver claramente,
a mi gran dolor, los restos del naufragio de un barco, arrojado en la noche sobre los oculta
rocas que encontré cuando yo estaba en mi barco, y que las rocas, ya que comprueba la
la violencia de la corriente, e hizo una especie de
contra-corriente o remolino, fueron la ocasión de mi recuperación de la mayoría de los desesperados,
condición desesperada que nunca había estado en en toda mi vida.
Por lo tanto, lo que es la seguridad de un hombre es la destrucción de otro hombre, pues parece que estos hombres,
quienesquiera que fuesen, estar fuera de su conocimiento, y las rocas están totalmente bajo
agua, habían sido expulsados con ellos en la noche, el viento soplando fuerte en ENE.
Habían visto la isla, ya que necesariamente ha de suponer que no lo hicieran,
que, como yo pensaba, se han esforzado para que se salvaron en la costa por la ayuda
de su barco, pero su disparo de armas de fuego
en busca de ayuda, especialmente cuando vi, como me imaginaba, mi fuego, me llenó de muchas
pensamientos.
En primer lugar, me imaginaba que al ver mi luz que podrían haberse puesto en sus
barco, y se esforzó por hacer de la costa: el mar, pero que funciona muy alto,
podría haber sido desechado.
Otras veces me imaginaba que podría haber perdido su barco antes, como podría ser el
caso de muchas maneras, sobre todo por la rotura de la mar en su barco, que
muchas veces obliga a los hombres a evitar, o tomar en
piezas, su barco, y en ocasiones para tirar por la borda con sus propias manos.
Otras veces me imaginaba que había algún otro buque o buques de la compañía, que, en el
señales de socorro que han hecho, les había tomado, y se los llevaron.
Otras veces me pareció que se habían ido todos a la mar en su barco, y se apresuró a ser
por la corriente que había estado anteriormente en, se llevaron a cabo en el
gran océano, donde no había nada, pero
la miseria y el perecer, y que, quizás, puede ser que por este tiempo de reflexión de morir de hambre,
y de estar en una condición para comer unos a otros.
Como todas estas conjeturas no eran sino el mejor, así que, en el estado en que estaba, lo que podía hacer
no más que mirar en en la miseria de los pobres, y la piedad ellos, que todavía tenía
este efecto positivo sobre mi lado, que le dio
me más y más motivos para dar gracias a Dios, que tan feliz y cómoda
siempre para mí en mi condición desolada, y la de dos empresas de los buques, que fueron
ahora desechado en esta parte del mundo, no una vida debe ser liberada, pero la mía.
Que he aprendido aquí de nuevo para observar, que es muy raro que la providencia de Dios pone en
nosotros en cualquier condición tan baja, o cualquier otra miseria tan grande, pero vemos que puede una cosa u otra
que estar agradecidos, y puede ver a otros en peores circunstancias que las nuestras.
Tal fue ciertamente el caso de estos hombres, de los cuales yo no podía siquiera ver el cuarto de
Supongo que todo se salvaron, y nada podía hacer, lógicamente, tanto como para desear o esperar
que no pierda todas ellas, excepto
la única posibilidad de que sean tomadas por otro barco de la compañía, y fue este
pero la mera posibilidad de hecho, para que vi no el menor signo o apariencia de cualquier tales
cosa.
No puedo explicar, por toda la energía posible de palabras, lo que es un extraño anhelo que sentía en mi
alma en este espectáculo, rompiendo a veces así: "¡Oh, que se había producido, pero
uno o dos, no, o sino una sola alma salvada
de este barco, que escapó a mí, que yo, pero han tenido un compañero, un
semejante, que ha hablado a mí ya han conversado con "En todo el tiempo
de mi vida solitaria, nunca me sentí tan
serio, tan fuerte el deseo de la sociedad después de la de mis semejantes, o tan profundas
un pesar por la falta de ella.
Hay algunas fuentes secretas en las afecciones que, cuando se estableció un curso
por algún objeto a la vista, o, aunque no a la vista, sin embargo, hace presente a la mente por
el poder de la imaginación, que el movimiento
lleva a cabo el alma, por su impetuosidad, a tal abrazos violentos, ansiosos de la
objeto, que la ausencia de ella es insoportable.
Tales fueron los wishings serio que un solo hombre se había salvado.
Creo que repite las palabras: "¡Oh, que había sido más que una" una y mil veces, y mi
deseos se sintió tan conmovido por ella, que cuando me dijo las palabras que hacerse con las manos
juntos, y mis dedos se pulse el
las palmas de mis manos, de modo que si hubiera tenido algo suave en mi mano me han aplastado
que involuntariamente, y los dientes en mi cabeza que golpear juntos, y frente a un
otra tan fuerte, que durante algún tiempo no pude participar de nuevo.
Deje que los naturalistas explicar estas cosas, y la razón y la manera de ellos.
Todo lo que puedo hacer es describir el hecho, que fue incluso sorprendente para mí cuando lo encontré,
aunque yo no sabía de dónde procedía, era sin duda el efecto de la ardiente
deseos, y de las ideas fuertes se formó en mi
mente, dándose cuenta de la comodidad que la conversación de uno de mis hermanos en Cristo
habría sido para mí.
Pero no fue así, ya sea su destino o en la mía, o ambos, se lo prohibió, ya que, hasta el
último año de mi ser en esta isla, no sabía si alguno se ha salvado de
que se incluyen o no, y sólo el
aflicción, algunos días después, al ver el cadáver de un niño ahogado en la playa vienen a
el extremo de la isla que estaba al lado del naufragio.
No tenía ropa, pero el chaleco de un marinero, un par de abiertos en las rodillas de lino
cajones, y una camisa de lino azul, pero nada que me directa tanto como para adivinar
¿qué nación era de.
No tenía nada en los bolsillos, sino dos piezas de a ocho y un tabaco de pipa, el último
fue para mí un valor diez veces más que el primero.
Ahora era tranquila, y yo tenía un gran espíritu de aventura en mi barco a este accidente, no
duda, pero que podría encontrar algo a bordo que podrían ser útiles para mí.
Pero eso no me presiona por completo tanto como la posibilidad de que podría haber
sin embargo, una criatura de vida a bordo, cuya vida no sólo puede salvar, pero podría, por
el ahorro que la vida, la comodidad de mi propia a la
último grado, y considera que se aferró a mi corazón para que yo no podía estar tranquila noche o
día, pero tengo que aventurarme en mi barco a bordo de este accidente, y cometiendo el resto
a la providencia de Dios, pensé que el
impresión fue tan fuerte en mi mente que no se podía resistir-que tiene que venir
de alguna dirección invisible, y que yo a querer a mí mismo si no
ir.
Bajo el poder de esta impresión, que se apresuró a regresar a mi castillo, preparado
todo para el viaje, tomó una cantidad de pan, una olla grande de agua dulce, una
brújula para orientar por una botella de ron (para que
había todavía una gran parte de esa izquierda), y una cesta de uvas pasas, y por lo tanto, la carga de mí mismo
con todo lo necesario.
Fui a mi barco, tiene el agua fuera de ella, tiene a flote, cargado de toda mi carga
en ella, y luego se fue a casa de nuevo para más.
Mi segunda carga fue una gran bolsa de arroz, el paraguas de establecer sobre la cabeza de un
sombra, otra olla grande con agua, y cerca de dos docenas de panes pequeños, o la cebada
pasteles, más que antes, con una botella de
de leche de cabra y queso, todo lo cual con gran esfuerzo y el sudor me llevó a mi
barco, y rezando a Dios para dirigir mi viaje, me puse a cabo, y el remo o remo
la canoa a lo largo de la costa, llegaron por fin a
el punto máximo de la isla en el lado norte-este.
Y ahora tenía que lanzarse a la mar, y ya sea a riesgo o no riesgo.
Busqué en las rápidas corrientes que funcionaba constantemente a ambos lados de la isla en un
distancia, y que eran muy terrible para mí el recuerdo de los peligros que había
estado antes, y mi corazón comenzó a fallar
mí, que previó que si se debió a ninguna de esas corrientes, que deben ser
llevado a una gran manera a la mar, y tal vez fuera de mi alcance o la vista de la isla
de nuevo, y que entonces, como mi barco no era más que
pequeños, en su caso poco ráfaga de viento debe levantarse, yo debería ser inevitablemente perdido.
Estos pensamientos tan oprimido mi mente que me empezó a dar más de mi empresa, y
haber arrastrado el bote en un pequeño arroyo en la orilla, salí y me senté
en un poco cada vez mayor de tierra, muy pensativo
y ansiedad, entre el miedo y el deseo, de mi viaje, cuando, como yo estaba meditando, podría
perciben que la marea se volvió, y la inundación vamos, en la que mi marcha era
impracticable por tantas horas.
Ante esto, actualmente se me ocurrió que yo debía ir hasta el más alto de la pieza
tierra que pude encontrar, y observar, si pudiera, ¿cómo los conjuntos de la marea o las corrientes
estaba cuando vino el diluvio en el que yo fuese
juzgar si, si, me llevaron una salida, yo no podría esperar para ser utilizado de otra forma
hogar, con la misma rapidez de las corrientes.
Este pensamiento era tan pronto en mi cabeza que yo echo mis ojos puestos en una pequeña colina que
suficientemente daba al mar en ambos sentidos, y de donde yo tenía una visión clara de la
corrientes o grupos de la marea, y de qué manera iba a guiarme en mi regreso.
Aquí he encontrado, que a medida que la corriente de flujo establecidos cerca de la punta sur de la
isla, por lo que la corriente de la inundación en conjunto cerca de la orilla del lado norte, y
que no tenía nada que hacer, pero para mantener a la
parte norte de la isla en mi regreso, y que debería hacer bien.
Animado por esta observación, me propuse a la mañana siguiente partió con la primera
de la marea, y yo descansando por la noche en mi canoa, bajo la vigilancia de capa I
mencionado, me lancé.
Primero hice un poco a la mar, lleno hacia el norte, hasta que comencé a sentir el beneficio de
la actual, que establece hacia el este, y que me llevó a gran velocidad, y sin embargo no
por lo que me prisa como el actual en el sur
lado había hecho antes, a fin de tener de mí todo el gobierno de la embarcación, pero tener un
tercera clase fuerte con mi remo, me fui a gran velocidad directamente a la ruina, y en
menos de dos horas me acerqué a ella.
Era un espectáculo triste de ver, el barco, que por su construcción era el español, pegados
rápido, atascado entre dos rocas.
Todos los de la popa y la cuarta parte de ella fueron despedazadas por el mar, y como su
castillo de proa, que se pegó en las rocas, se había quedado con gran violencia, su palo mayor
y trinquete fueron traídos por la Junta-que
es decir, de corto roto, pero su bauprés de sonido, y la cabeza y el arco
parecía firme.
Cuando se acercó a ella, apareció un perro sobre ella, que, al verme venir, lanzó un grito y
-gritó, y tan pronto como lo llamé, saltó al mar para llegar a mí.
Lo llevé en el barco, pero lo encontró casi muerto de hambre y sed.
Le di una torta de pan, y lo devoró como un lobo hambriento que se había
se muere de hambre un par de semanas en la nieve, me dio la pobre criatura alguna nueva
agua, con lo cual, si lo hubiera dejar, él se habría reventado.
Después de esto fui a bordo, pero la primera vista, me encontré con dos hombres se ahogaron en el
cocina-comedor, o castillo de proa de la nave, con los brazos rápidamente el uno del otro.
Llegué a la conclusión, como lo es incluso probable, que cuando el barco chocó, quedando en una tormenta,
el mar se rompió tan alto y tan continuamente sobre ella, que los hombres no fueron capaces de
soportarlo, y se estranguló con la
constante por tierra en el agua, tanto como si hubieran estado bajo el agua.
Además de los perros, ya no quedaba nada en el barco que había vida, ni bienes que,
Yo podía ver, pero lo que se echaron a perder por el agua.
Había algunos toneles de licor, ya sea vino o brandy que no sabía, que se encontraba más bajo
en la bodega, y que el agua está decaído, yo podía ver, pero eran demasiado
grandes para meterse con.
Vi varios cofres, que creo que pertenecían a algunos de los marineros, y se me
dos de ellos en la barca, sin examinar lo que había en ellos.
Tenía la popa de la nave ha solucionado y la parte delantera rota, yo estoy convencido de
podría haber hecho un buen viaje, por lo que he encontrado en los dos cofres que había espacio para
Supongo que la nave tenía una gran cantidad de riqueza
a bordo, y, si se me permite adivinar a partir de la derrota que condujo, debe haber sido
iba de Buenos Aires, o el Río de la Plata, en la parte sur de América, más allá de
al Brasil a La Habana, en el Golfo de México, y lo que tal vez a España.
Había, sin duda, un gran tesoro en ella, pero de nada, en ese momento, a nadie;
y qué fue de la tripulación que entonces no conocía.
Me pareció, además de estos pechos, un pequeño barril lleno de licor, de unos veinte
galones, lo que me metí en mi barco con mucha dificultad.
Hubo varios mosquetes en la cabina, y un gran polvo de cuerno, con cerca de cuatro
libras de pólvora en él, como para los fusiles, que no tuvo ocasión de ellos, así que los dejé,
sino que tomó el polvo de cuerno.
Tomé una pala de fuego y las tenazas, lo que yo quería extremadamente, así como dos de bronce pequeña
hervidores de agua, una olla de cobre para hacer chocolate, y un campo de juego, y con esta carga, y
el perro, me fui, la marea empieza a
hacer de nuevo en casa y esa misma noche, alrededor de una hora en la noche, llegué a la isla
una vez más, cansado y fatigado hasta el último grado.
Yo descansaba esa noche en el barco y en la mañana me decidí a puerto lo que había
tengo en mi nueva cueva, y no llevarlo a casa de mi castillo.
Después me refrescante, tengo toda mi carga en tierra, y empezó a examinar el
detalles.
El barril de licor que encontré para ser una especie de ron, pero no como la que tuvimos en el Brasil;
y, en una palabra, no del todo bien, pero cuando fui a abrir el pecho, me encontré con varios
cosas de gran utilidad para mí, por ejemplo, que
en un caso bien de botellas, de un tipo extraordinario y lleno de cordialidad
aguas, fina y muy bueno, las botellas cabo alrededor de tres litros cada uno, y se
con puntas de plata.
He encontrado dos vasijas de succades muy bueno, o dulces, por lo que también se fija en la parte superior
que el agua salada no los había herido, y dos más de lo mismo, que el agua se había
en mal estado.
Encontré algunas camisas muy buenas, que fueron muy bienvenidos a mí, y alrededor de una docena y una
la mitad de los pañuelos de lino blanco y neckcloths color, el primero también
muy bienvenida, siendo muy refrescante para limpiar mi cara en un día caluroso.
Además de esto, cuando llegué a la caja en el pecho, me di cuenta que tres bolsas grandes
de piezas de a ocho, que celebró sobre un mil cien piezas en total, y en uno de ellos
envuelto en un papel, seis doblones de
oro, y algunos pequeños bares o cuñas de oro, supongo que todos ellos podrían pesar cerca de una
libras.
En el pecho, otros fueron un poco de ropa, pero de poco valor, pero, por las circunstancias,
debe haber pertenecido a su compañero del artillero, aunque no había polvo en ella, excepto
dos libras de polvo de cristal fino, en tres
frascos, mantiene, supongo, para cargar sus escopetas de caza en la ocasión.
En conjunto, tengo muy poco de este viaje que fue de ninguna utilidad para mí, porque, como
con el dinero, no tenía manera de ocasión para ello, era para mí como la tierra bajo mis
los pies, y me han dado todo por
tres o cuatro pares de zapatos y las medias de Inglés, que eran cosas que en gran medida
quería, pero había tenido ninguno en mis pies durante muchos años.
Había, en efecto, tiene dos pares de zapatos ahora, que me quité los pies de dos ahogados
hombres a los que vi en el accidente, y me encontré con dos parejas más en uno de los cofres, que
eran muy bienvenido para mí, pero no se
como los zapatos Inglés, ya sea para facilitar o servicio, en lugar de ser lo que llamamos las bombas
que los zapatos.
Encontré en el pecho de este hombre de mar de alrededor de cincuenta piezas de a ocho, en riales, pero el oro no:
supone que este pertenecía a un hombre pobre que el otro, que parecía pertenecer a alguna
oficial.
Bueno, sin embargo, con tacos de este dinero a mi cueva, y lo puso arriba, como lo hubiera hecho
antes de que yo había traído de nuestro propio barco, pero era una gran lástima, como ya he dicho,
que la otra parte de esta nave no se había
me vienen a compartir, porque yo estoy convencido de que podría haber cargado mi canoa varias veces
sobre con dinero, y pensé que, si alguna vez escapar a Inglaterra, es una gran mentira aquí seguro
suficiente hasta que yo vuelva a buscarlo.